Siempre he pensado en la política y el poder de la palabra, como instrumentos para cambiar el mundo, no hay nada que no se resuelva dialogando, hoy después de estar pasando una de las crisis más importantes en nuestra historia reciente, me reafirmo más en la creencia. ¿Que hubiera sido de nosotros sin una instituciones democráticas consolidadas?, a menudo escuchamos a la derecha española atacar la política, su objetivo es desacreditarla hasta que la ciudadanía considere que no es necesaria y que todos los políticos son iguales, ¿os suena esa frase de algo?, constantemente la escuchamos, cuando expresiones como esta, calan en la sociedad, lo siguiente es la subida al poder de partidos fascistas y populistas, esto pasó en la Alemania de Hitler, en España con Franco y en Italia con Mussolini, pero no nos tenemos que ir muy atrás, ahora en el presente está pasando en Brasil, en Reino Unido y en Estados Unidos etc, democracias consolidadas en la que la historia se vuelve a repetir.
En España porque así lo decidimos en las últimas elecciones, tenemos un gobierno a la altura de las circunstancias, que desde el primer minuto ha afrontado esta crisis sanitaria y económica protegiendo a la personas, pero siempre desde el diálogo y el respeto a la instituciones, nunca ha habido tanta transparencia, hemos visto comparecencias a diario del Ministro de sanidad, de las autoridades sanitarias, comparecencias semanales de Pedro Sánchez dando información, conferencias del presidente del gobierno con los presidentes autonómicos concocadas semanalmente, este diálogo y transparecencia en las instituciones se ve empañado por la actuación del Partido Popular y su partido hermano Vox, que han convertido los debates del Congreso de los diputados, en un ejemplo de lo que no debe ser un debate parlamentario democrático, con insultos y descalificaciones hacia el presidente y miembros del gobierno, mientras los ciudadanos soportaban el confinamiento con dignidad, empresarios y sindicalistas dialogaban educadamente para alcanzar acuerdos y el presidente intentaba llegar a acuerdos con los presidentes autonómicos, la derecha española ( PP y Vox) se dedicaban a insultar y comportarse de forma desleal con el gobierno justo en el momento en el que más falta hacía su apoyo.
El gobierno de España con un Consenso Social amplísimo alcanzado a través de la negociación entre los agentes sociales y los poderes públicos ha arbitrado medidas de protección del conjunto de la población que han evitado una catástrofe humanitaria que hubiera sido enorme, un gobierno que decidió desde el comienzo de esta crisis proteger y rescatar a las personas, a las pymes y a las empresas, conscientes de la importancia de apoyar a nuestro tejido productivo, y que ha ido más allá queriendo dignificar a las personas creando el Ingreso Mínimo Vital,(ingreso que ya estaba previsto antes de la crisis) que no solo es una contribución a mejorar la vida de las personas, el Ingreso mínimo vital, nace Con la voluntad de que incentive el movimiento, es decir que ayude a los que puedan ayudar, a encontrar un empleo y dejar de depender de ella y que aseguren un mínimo de recursos aquellos que no tengan dicha posibilidad y que pase a atender los casos que han caído en pobreza.
Imaginarse como hubiera afrontado esta grave crisis el Partido Popular, es fácil, tenemos el ejemplo de cómo actúo en la anterior crisis Económica, desmantelando los Servicios Públicos ( Sanidad y Educación) respaldando a los grandes Poderes económicos, entregando dinero a los bancos a cambio de nada y dejando desprotegida a la población, todavía tenemos en nuestra mente la imagen de los desahucios y de nuestros jóvenes marchándose al extranjero, y como ejemplo más cercano tenemos, la actuación de la Comunidad de Madrid y su presidenta que decidió preservar el legado político del Partido Popular, en lugar de reconocer que su sanidad no estaba en condiciones de tratar a los enfermos que lo necesitaban, debido al desmantelamiento de los servicios sanitarios que lleva años produciéndose en esa comunidad, el resultado ha sido catastrófico, porque opto por evitar el colapso de la sanidad a cualquier precio y el resultado ha sido la muerte de todas esas personas mayores, abandonadas a su suerte en la habitaciones de las residencias, esto es intolerable. Cuando la política se olvida de las personas ocurren estas cosas, solo es posible salir de esta crisis desde una protección y defensa de lo público, rescatando y protegiendo a las personas.
¡DESTACAMOS!
