Ya han pasado más de 100 días desde que se constituyera la Corporación municipal del Ayuntamiento de Rute para el periodo 2015 – 2019, y como es habitual en estos casos es momento de hacer valoraciones y reflexionar sobre lo que son los primeros días de gobierno, y lo que parece que será a grandes rasgos la forma de trabajar de nuestro Ayuntamiento durante los próximos cuatro años.
Aunque nos gustaría poder hacer otra valoración, y estar en posición de decir que todo es maravilloso y todo va como la seda, tristemente las pruebas demuestran otra cosa, y es que vemos que en éstos 100 días todo sigue igual en nuestro pueblo. Si antes Rute ofrecía una imagen y una sensación de suciedad y abandono, hoy sigue ofreciendo esa misma imagen. Si antes la sensación era que el Ayuntamiento hacía poco o nada por promover el deporte municipal, ahora la sensación es similar. Si antes la sensación era que las cosas se hacían por desidia, de manera ineficaz, con desgana, sin ilusión, y abandonados a la inercia, ahora la sensación sigue siendo la misma desidia, la misma desgana y la misma falta de ilusión, con el agravante de que antes había siete personas gobernando y ahora hay once más los agregados. Esto es un continuo con cualquier asunto que a uno se le venga a la mente y que esté relacionado con la gestión municipal.
En un razonamiento rápido y simplista alguien podría decir “Qué van a decir, son la oposición”. La mejor forma de medir la actividad municipal es evaluando las sesiones plenarias y las comisiones informativas, y en éstos órganos se está viendo que el Ayuntamiento de Rute aún no se ha puesto a trabajar en serio desde que tomó posesión allá por el mes de junio. Con la excusa de que la Corporación estaba recién formada y no había dado tiempo a trabajar nuevos asuntos, la sesión plenaria del mes de julio contaba sólo con cuatro puntos en la parte de carácter resolutivo, de los que ninguno estaba relacionado con la gestión. Si nos trasladamos a la sesión del mes de septiembre el asunto aún es más grave pues en éste caso el único punto a tratar fueron los asuntos de urgencia, ésta vez con la excusa de que con el verano de por medio no había dado tiempo a desarrollar asuntos ni a formular proyectos.
Consideramos extremadamente grave que un equipo de gobierno formado por once personas, en un pueblo del tamaño de Rute, no sea capaz de aportar ningún proyecto en 100 días. ¿Acaso es esto lo que nos espera para los cuatro próximos cuatro años? ¿Es ésta la ilusión renovada y las ganas de trabajar de las que se nos hablaba? ¿A qué espera nuestro Alcalde para ponerse las pilas y empezar a trabajar de verdad por nuestro pueblo?
Tristemente el Alcalde de Rute está demostrando que no podemos esperar de él mucho más de lo que está dando. Aunque fue elegido para ser Alcalde de todos los ruteños, el tiempo está demostrando que su cabeza está más pendiente de otras cosas y tiene escaso interés por la Alcaldía y por gestionar y solucionar los problemas, que no son pocos, del pueblo de Rute, al que, si acaso, dedica una mañana a la semana. No hay más que ver cualquier periódico en el que se muestra que o bien está atendiendo los asuntos de su cargo de Presidente de la Diputación de Córdoba, o está inmerso en los asuntos propios de la gestión del PSOE de Córdoba.
Nos alegramos mucho de que su carrera política sea tan productiva. Pero recordando sus propias palabras de su discurso de investidura, tiene una responsabilidad que es para lo que le han votado los ruteños; por eso le rogamos que no se desvíe del encargo y de una vez por todas empiece a trabajar por el pueblo de Rute, que es su primera y más importante obligación.