El paro alcanza sus mejores datos en Rute desde julio del año pasado

  • En junio ha vuelto a caer por segundo mes y se sitúa en 426 personas, cinco menos que en mayo, aunque el balance interanual sigue siendo negativo

A pesar de la buena tendencia desde octubre, el balance interanual sigue siendo negativo

Continúa el goteo descendiente del paro en Rute. Según el último informe del Observatorio Argos para la Junta de Andalucía, el pasado mes de junio concluyó con 426 personas desempleadas en la localidad. Son apenas cinco menos que en mayo. Más allá, pues, de esa caída moderada, lo importante poner esos datos en contexto. Es la mejor cifra desde julio del año pasado. Entonces había 409 parados. Un mes antes, en junio de 2023, los desempleados eran 411. Por lo tanto, pese a la tímida recuperación reciente, el balance interanual sigue siendo negativo.

Con cierta perspectiva, en lo que va de 2024 han alternado las bajadas y las subidas. Aun así, la tendencia es decreciente desde la pasada campaña de Navidad. En octubre, mes de comienzo de la campaña en Rute, había 464 personas registradas en la Oficina de Empleo, tras un ascenso progresivo a lo largo del verano. A su término, a finales de diciembre, la cifra había caído a 431. Desde enero, han alternado los picos, de modo que la situación actual apenas difiere en cinco parados desde diciembre.

En cuanto a la brecha de género, vuelve a ser muy desfavorable para las mujeres. De hecho, el casillero del paro femenino ha aumentado en una persona en el último mes, mientras que el de los hombres ha caído en seis. Así, ahora mismo hay 176 varones en busca en empleo, por los 182 que había en mayo. En cambio, las mujeres sin trabajo son 250. Es decir, hay una diferencia de 74 desempleadas más.

En cualquier caso, como es habitual en la serie histórica (desde 2005), la caída del paro es muy suave. Desde que Argos gestiona esta información, junio no es un mes de grandes cambios. Ni las subidas ni las bajadas han sido acentuadas. Sólo en episodios puntuales ha habido fuertes descensos. Ocurrió, por ejemplo, en 2016, con 36 parados menos que en mayo, o al año siguiente, en que se registraron 20 personas menos.

Ni la crisis sanitaria de 2020 alternó de manera significativa estas cifras, aunque el desempleo se redujo en 11 personas. En aquel momento, los estragos de la Covid-19 afectaban al empleo y los parados en junio de ese año eran 735. Sí se notó, y mucho, en 2021, tras un invierno de cierres perimetrales y restricciones. De mayo a junio la casilla de gente sin trabajo bajó en 70 inscritos, de 674 a 604. En los tres años siguientes se ha mantenido esa dinámica, aunque de manera más moderada, como ahora.

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