El máximo nivel del Pantano de Iznájar despierta la curiosidad de vecinos de Rute y otras localidades próximas

Muy  poco antes de que el embalse alcanzara el l00% de su capacidad, se optó por abrir uno de los  desagües del fondo de la presa

Muy poco antes de que el embalse alcanzara el l00% de su capacidad, se optó por abrir uno de los desagües del fondo de la presa

El gigante vuelve a estar virtualmente lleno. El embalse de Iznájar, el más grande de Andalucía, que abarca los términos municipales de Rute, Algarinejo, Cuevas de San Marcos, Iznájar, Loja y Zagra, ha rozado de nuevo el 100% de su capacidad. Para ser exactos, a mediodía del jueves, 14 de marzo, ese porcentaje fue del 99,68%. A esas horas, el llamado “Lago de Andalucía” albergaba 977,93 hectómetros cúbicos de agua, casi al límite de los 981,1 que puede llegar a soportar. De inmediato, se aumentó el caudal de desembalse, que hasta ese momento era de unos 84 metros cúbicos por segundo. En las dos semanas previas, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir había autorizado desembalses puntuales y esporádicos. A partir de mediodía del jueves, en vista de que el pantano estaba virtualmente lleno y no existía riesgo aguas abajo, se abrió uno de los desagües del fondo, para desocupar a un ritmo de 131,54 metros cúbicos por segundo.

Desde que se inauguró el 6 de junio de  1969, es la cuarta ocasión en que se produce una situación similar. Fue en 1978 cuando estuvo por primera vez a tope. Para volver a verlo así habría que esperar hasta 1997, en que se llegó al 98%. Hace tres años, en marzo de 2010, volvió a alcanzar el lleno. Pero probablemente nunca antes el agua había llegado a rozar el nivel superior de las compuertas, como ha ocurrido ahora. Ésa era la llamativa imagen del embalse a mediodía del jueves. Parecía que en cualquier momento el agua fuera a sobresalir por arriba de la presa, ubicada justo entre los términos de Cuevas de San Marcos y Rute. Para evitar tal extremo, están los siete desagües del fondo, además del canal de la central eléctrica, que es siempre el primero en usarse, para aprovechar la fuerza del agua en la generación de electricidad. Por ahora, sólo ha sido necesario abrir uno de esos desagües de fondo. Actualmente, tienen un diámetro de 2,3 metros, después de que el Ministerio de Medioambiente invirtiera 5,5 millones de euros en la primera mitad de la pasada década en reemplazar los anteriores.

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