El barrio de San Pedro combate el calor con la verbena de la hermandad del Abuelito

Durante tres noches y el domingo a mediodía el público pudo tomar algo y a la vez colaborar con la hermandad
Durante tres noches y el domingo a mediodía el público pudo tomar algo y a la vez colaborar con la hermandad

Del 3 al 5 de julio se ha respirado ambiente festivo en el barrio ruteño de San Pedro. La hermandad Nuestro Padre Jesús de la Humildad y la Soledad de Nuestra Señora celebraba su verbena popular. Siempre se suele ubicar en el fin de semana más próximo a la onomástica de San Pedro, el 29 de junio. Por cercanía cronológica, hubiera correspondido el fin de semana anterior, el último de ese mes. Sin embargo, se optó por aplazarla para no hacerla coincidir con la Magna Mariana de Córdoba, a la que se desplazaron unas dos mil personas desde Rute.

Por tanto, ha sido a primeros de julio cuando, durante tres noches consecutivas se ha intentado aliviar el intenso calor de estas fechas. Para ello, además de degustar tapas, raciones y bebidas, el último día, el domingo por la noche, se pudo disfrutar de la música en vivo. Como viene haciendo desde hace unos años, la Banda Municipal trasladó a San Pedro su concierto correspondiente al ciclo estival. El resto de noches también hubo ambientación musical. Además, en la primera se retomó la animación infantil que tan buen resultado había dado el año pasado. Por otra parte, junto a estas veladas, el domingo a mediodía se reeditó la paella popular. Este año, como novedad, ha habido también un campeonato de futbolín.

Son, en definitiva, diversas formas de contribuir a que la gente lo pase bien durante un rato. El presidente de la hermandad, Pedro Antonio Aguilera, señala que se trata de hacer hermandad y unir a los vecinos del barrio, puesto que San Pedro “va a más allá” de la ermita del mismo nombre. El presidente ha recordado y agradecido la aportación fundamental que hacen estos vecinos. Tampoco esconde que las verbenas siguen siendo la principal fuente de financiación de las cofradías de Rute. Con ellas, se costea no sólo los gastos de poner los pasos procesionales en la calle, sino que también ayudan al mantenimiento del patrimonio. De hecho, el proyecto más “inminente” de la hermandad es la restauración de las puertas de la ermita de San Pedro, “que, como cualquiera puede comprobar, están muy deterioradas”.

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