Editorial marzo 2022

En marzo se ha cumplido el segundo aniversario del comienzo de la pandemia. De nuevo, ha sido un mes convulso. Cuando aún no nos hemos recuperado ni superado la crisis sanitaria y económica generada por la Covid -19 hemos de padecer las consecuencias de otros acontecimientos que se juegan en el terreno nacional e internacional. Hace un par de años, la sociedad actual no concebía, o no era consciente, de que un virus pudiera poner en jaque a la población mundial. Sin embargo, ocurrió. Ahora, asistimos atónitos a ver cómo se lleva a cabo la invasión de Ucrania, por parte de Rusia. También comprobamos cómo se vulneran derechos humanos que tanto ha costado conquistar. Incluso una tercera guerra mundial nos parece posible. Como ocurriera con la pandemia, nuevos términos han comenzado a calar en la población, como el de la estanflación. Nos estamos enfrentando a un estancamiento económico, con precios que persisten al alza.
La batalla de la crisis energética y los elevados precios de los carburantes han provocado las protestas de los camioneros y los transportistas de nuestro pueblo. La situación ha terminado repercutiendo en otros ámbitos de la población. En Rute, durante los días más duros de las reivindicaciones del sector de las mercancías hemos podido constatar cómo empleados de diferentes empresas locales se han visto obligados a dejar de trabajar. También han llamado la atención las imágenes de almacenes llenos de mercancía a la que no se podía dar salida. Esto ha colapsado la producción de muchas firmas ruteñas. De igual modo, la pequeña y mediana empresa de nuestra localidad ha sufrido la falta de abastecimiento de materiales.
Afortunadamente, en los supermercados del municipio, aunque han escaseado determinados productos, no ha habido desabastecimiento. Lo mismo ha ocurrido en las tiendas de barrio o en las carnicerías, en las que ha comenzado a faltar carne de pollo y pavo. Por tanto, hemos concluido un mes en el que hemos estado pendientes de esos acuerdos entre el Gobierno y el sector del transporte, y muy preocupados por su repercusión en el empleo y en la economía de las familias ruteñas.
A nivel municipal, se ha seguido apostando por el adecentamiento de caminos rurales, como el de Pantanilla, de interés para los agricultores y de acceso a numerosas fincas de olivar. Al mismo tiempo, el Ayuntamiento continúa con su apuesta de dotar de parques infantiles, totalmente equipados y seguros, a las distintas barriadas del pueblo. Con el nuevo de la urbanización de Pontanilla ya son cuatro las infraestructuras de estas características que se han construido en el último año.
Marzo, además, ha vuelto a ser el mes en el que se han retomado las actividades de sensibilización y apoyo al colectivo de la mujer. Han vuelto las concentraciones de 8M condenando la violencia machista e invitando a no negar esta realidad. Por lo demás, el mes que ha concluido ha estado a caballo entre la celebración del Carnaval y la antesala de la Semana Santa. El Carnaval ruteño nos ha dejado varios actos multitudinarios, con pasacalles temáticos, actuaciones diversas, conciertos y la vuelta del Entierro de la Sardina o el gran pasacalles del Domingo de Piñata. Sin duda, estamos ante una de las fiestas y tradiciones de más arraigo en la localidad. Así, de nuevo en este 2022 hemos podido confirmar que el Carnaval de Rute goza de buena salud. En cuanto a la Semana Santa, también se prevé que se retome casi con normalidad, tras dos años sin pasos procesionales. En este sentido, marzo ha finalizado con algunos de los actos y cultos cuaresmales preparativos de nuestra Semana Mayor, como el pregón o la Exaltación del Abuelito.
Por otro lado, queremos destacar la nómina de colaboradores en el apartado de Opinión de este periódico. En marzo, a las habituales columnas de Justi Gómez Navajas, Francisco David Ruiz, Sebastián García y Luis Jiménez, se suma una viñeta de Óscar Gómez y Víctor Pacheco, artífices de la revista satírica “El Pisiaso”. Por nuestra parte, sólo nos cabe expresar satisfacción por el hecho de que se siga incrementando y manteniendo la nómina de columnistas del periódico, quienes sin duda con sus opiniones y puntos de vista enriquecen esta publicación local.

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