Ecovidrio es una entidad sin ánimo de lucro dedicada a gestionar el reciclado del vidrio. Opera en toda España. Ahora, a través de la zona sur que engloba Andalucía occidental, Extremadura, Ceuta y Melilla, va a llevar a cabo una campaña en Rute. Así, va a renovar los contenedores de vidrio del municipio y acaba de emprender una acción informativa con los hosteleros ruteños. De presentar esta campaña ante los medios se han encargado el teniente de alcalde Manuel Muñoz y Coral Rojas-Marcos, gerente de zona de Ecovidrio. Según Muñoz, se pretende mejorar el porcentaje de reciclaje y la calidad de la recogida de vidrio. El teniente de alcalde ha dejado claro que no supondrá ningún coste adicional al Ayuntamiento, en virtud del acuerdo que existe con Epremasa. La empresa provincial se ocupa de la gestión del vidrio en el municipio. Tampoco implica modificación alguna de la tasa que Epremasa cobra por la recogida de basura.
Coral Rojas-Marcos ha adelantado que la campaña se va a dividir en varias fases. Por un lado, se van a cambiar los contenedores. También van a hacer encuestas a los hosteleros para comprobar quién está interesado en el reciclaje. A los hosteleros que lo deseen se les va a entregar un cubo adaptado para recopilar el vidrio y depositarlo de forma más cómoda en los nuevos contenedores. Se trata de cubos de 120 litros de volumen con ruedas. Ello permite depositar el envase desde el momento de su uso y luego facilitar el traslado al contenedor. Los nuevos contenedores disponen de una boca más ancha para enganchar el cubo. Tanto el cubo como el contenedor corren a cargo de Ecovidrio.
Según los datos de 2013, último año del que hay referencias publicadas, en Rute se reciclaron 8,25 kilos de vidrio por habitante. Estamos, pues, por encima de la media provincial, de 7,29 kilos por habitante. Eso sí, Córdoba queda por debajo de Andalucía, con 9,25 kilos, y su vez nuestra comunidad y Extremadura aún distan de la media nacional, que está en 14,6 kilos/habitante. Los datos de Rute además son mejores que la media provincial, cuando el porcentaje de contenedores es algo inferior. Ahora mismo hay 19, uno por cada 556 habitantes, mientras que la media cordobesa es de uno por cada 397. Eso significa que habría que instalar dos más. La gerente ha recordado que a estos contenedores “sólo deben ir envases de vidrio”. Ahí se incluyen botellas, frascos y tarros, por supuesto sin las tapas o los tapones de cada uno. Otros utensilios como una bombilla, vitrocerámica o tubos fluorescentes han de llevarse al punto limpio.
Rojas-Marcos ha recordado el ahorro energético y económico que supone el reciclaje del vidrio. Como ejemplo, por cada envase se ahorra energía para mantener “una bombilla de bajo consumo encendida durante 24 horas”. Manuel Muñoz ha pedido la colaboración de los establecimientos a los que acudan los responsables de Ecovidrio para elaborar las encuestas. Por otra parte, el concejal ha avanzado que se está poco a poco adecentando el punto limpio. Ya se está haciendo “con recursos propios” la cubierta para los contenedores específicos como los de aceite, pilas o material informático. Calcula que toda la parte exterior estará lista a lo largo del mes de abril, y para mayo retomar conversaciones con Epremasa. La idea es que la empresa de Diputación “gestione” el punto limpio. De esta forma, habría horarios específicos de apertura y una persona controlando todo el material que entra.
