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Según el gerente, José Manuel Molina, apuestan por innovar, aunque mantienen la destilación artesanal, con alambiques de cobre, leña de olivo y matalahúva
José Manuel Molina – Destilerías Raza
Coincidiendo con el puente del Pilar, la afluencia de público a Rute ya se ha dejado notar en las distintas industrias del anís y los mantecados. Según José Manuel Molina, actual gerente de Destilerías Raza, la presente campaña de Navidad ha arrancado “de la mejor manera posible”. No esperaban que con unas temperaturas altas para la época acudiera tanta gente como ha venido en el pasado puente de Fiesta Nacional. Ha sido público ante todo andaluz, en su mayoría de Córdoba y Málaga. Según ha detallado Molina, son clientes habituales que prefieren hacer sus compras en este comienzo de la campaña, antes de que ésta se intensifique.
- Según Molina, la campaña ha arrancado con gran afluencia de público durante el puente del Pilar
Destilerías Raza es una de las firmas centenarias de Rute, y su actual gerente representa a la quinta generación de fabricantes. Desde que está al frente de Raza, Molina ha enfocado parte de su gestión en modernizar e innovar la industria manteniendo la esencia de lo tradicional. De ahí que este año hayan adquirido una nueva máquina embotelladora. Añadida a la etiquetadora que tenían, podrán envasar más cantidad en menos tiempo. Según ha informado, la anterior maquinaria databa de los años 80 y su funcionamiento era prácticamente manual.
Con la nueva incorporación se mejora notablemente la eficiencia del proceso productivo, se reducen los tiempos de entrega al cliente y se refuerza la capacidad de competir en un mercado global con un producto de calidad, elaborado de forma tradicional. La característica principal que siguen defendiendo es la destilación artesanal, con alambiques de cobre, leña de olivo como combustible y matalahúva como materia prima. La adquisición de la nueva embotelladora ha sido posible gracias a una subvención del Grupo de Desarrollo Rural (GDR), a través del programa LEADER, con fondos de la Unión Europea y la Junta de Andalucía.
La inversión de esta máquina ronda los cuarenta y cuatro mil euros, una cifra, confiesa, inasumible para una empresa familiar como la suya. De ahí que agradezca la existencia de esas líneas de ayuda, que ha financiado el 50% del coste. No querían instalarla en plena campaña anterior, de modo lo hicieron después de que concluyera, en febrero pasado. De esta forma, en la actual sí puede funcionar a pleno rendimiento. Los productos estrella son el anís seco y el dulce. A ellos se han sumado el anís dulce Premium, de doble destilación, y la ginebra Mezquita.
En todos los casos, mantienen la misma filosofía de la elaboración artesanal. Esa idea ha calado en el público de entre 35 y 50 años. Sin perder de vista que los gustos y las modas tienen un carácter cíclico, cree que el sector del anís “está en auge”. No en vano, se consume durante todo el año, aunque no cabe duda de que en estas fechas se dispara la demanda. Con esos mimbres, el futuro de la empresa se afronta con optimismo, buscando nuevos mercados en el panorama nacional e internacional. De lo contrario, sentencia que habría abandonado el proyecto.
