Cuentan, que el origen de ésta popular expresión española, se remonta a los Tercios Españoles, aquellas unidades de élite del Imperio Español, en las que los soldados debían cubrir sus gastos y necesidades con el estipendio que recibían de las arcas reales. Así pues, un arcabucero que debía hacer frente al gasto de armamento y pólvora de su propio bolsillo durante una campaña militar, se cuidaba muy mucho de hacer uso “alegremente” de lo que tan escasamente disponía. No obstante, a veces, en caso de asedios o tras alzarse con una plaza enemiga, se conseguía pólvora de los “polvorines” y almacenes reales, lo que se conocía como “pólvora del rey”, en cuyo caso, su uso se hacía de un modo mucho más alegre y de forma menos conservadora, del mismo modo en que puede observarse la gestión y el uso del dinero público en nuestro Ayuntamiento. Aquí en éste Ayuntamiento, nos encontramos con que por norma general nunca hay dinero para nada. Para nada, salvo para aquello que le venga en gana o apetezca gastar a los concejales del cogobierno formado entre Partido Socialista e Izquierda Unida, y nos encontramos con que ese para nada, se convierte en un para todo lo que a ellos les apetezca. El último capítulo lo hemos visto en la negligente y desastrosa gestión (de la que tiempo habrá de hablar) que por parte de la Concejalía de Festejos se ha llevado a cabo con la organización de nuestro Carnaval, actuando de forma improvisada y atropellada, y poniendo de manifiesto una vez más que aquí se funciona como si de un cortijo se tratara y sobre la marcha, y poco se cuida en qué se gasta el dinero público, pues como decía aquella Ministra Socialista, el dinero público no es de nadie. Es indignante y vergonzoso, ver cómo se dilapida el dinero público en nuestro Ayuntamiento, mientras nos encontramos con que se mantiene a parte de la plantilla de personal con la jornada reducida y sin perspectivas de restituírsela. Apelamos al más elemental sentido de la responsabilidad y el respeto a lo público, y pedimos, por favor, respeto por el dinero que con tanto esfuerzo pagamos entre todos los ruteños.
Por otro lado, en estos días en que celebramos el día de Andalucía, debemos pararnos a reflexionar sobre lo que significa ser andaluces y reivindicar a nuestros gobernantes para que saquen todo el partido posible a nuestra tierra. No podemos conformarnos a que nos releguen a ser una comunidad de segunda, como le interesa a algunas gobernantes que prefieren tener una región aletargada, porque estás más que comprobado que por historia, valores y cultura, Andalucía tiene potencial, coraje y fortaleza para ser la locomotora de España, y en éstos tiempos en que algunos se empeñan en poner en tela de juicio nuestro modelo de país, Andalucía es el más claro ejemplo de cómo España es una tierra rica en la que dentro del respeto, todos tenemos cabida.
En último lugar, queremos felicitar a todos los galardonados con los “Premios Villa de Rute” que se entregan estos días. Sois ejemplo de compromiso y respeto hacia nuestra sociedad y hacia los valores que deben hacer grande nuestro pueblo y sois el espejo en que debemos mirarnos. Recibir un Villa de Rute es el justo reconocimiento que se puede y se debe hacer por tantos años de trabajo y entrega desde uno u otro ámbito hacia nuestra sociedad. Enhorabuena, y gracias por tanto como nos habéis dado.
¡DESTACAMOS!