El Barrio Alto de Rute engalana algunas de sus calles para la Octava del Corpus

  • Se consolida esta costumbre recuperada hace cinco años de llevar la Custodia a otros rincones del casco urbano por donde no pasa la procesión


Pese a los cambios que ha traído este año la festividad del Corpus Christi, lo que no ha variado ha sido la celebración, justo al domingo siguiente de la Octava del Corpus. Se denomina así a la salida extraordinaria que se hace para que la Custodia llegue a otros puntos de las ciudades por los que no pasa el itinerario oficial. En Rute, tras varias décadas sin llevarse a cabo, se recuperó en 2014. Desde entonces la Octava recorre los alrededores de la parroquia de San Francisco de Asís.

A lo largo del trayecto se habían colocado un total de siete altares, en casas de hermandad y domicilios particulares. También hay que resaltar la participación del vecindario, que adornó algunas de las calles con las alfombras coloreadas con motivos florales propias de este día. Un ejemplo de estas largas alfombras se podía ver en el primer altar del recorrido. Estaba justo frente a la parroquia, con una réplica de la Morenita.

En el segundo altar, en la puerta del Museo del Jamón, la réplica era de la Virgen del Rocío. En la calle Priego había dos más, uno particular  y otro en la fachada de la casa de hermandad del Cristo de la Misericordia. La calle Padre Manjón estaba adornada en sus dos tramos (separados por la intersección con Juan Valera) por otras tantas alfombras que ocupaban casi toda la calzada. Además, en la mitad había otro altar. Los dos últimos del recorrido se ubicaban en la calle Fresno. Uno estaba en un domicilio particular y el otro justo enfrente, en la nueva casa de hermandad de la cofradía de la Virgen de la Cabeza.

La verbena se ha celebrado en el Paseo Francisco Salto

Verbena de San Pedro

La actividad cofrade del último fin de semana de junio no se ha reducido a la Octava del Corpus. En otro contexto, la hermandad del Abuelito organizó su verbena de San Pedro. Se ha celebrado del viernes 28 al domingo 30 y, como empieza a ser ya habitual, se trasladó al Paseo Francisco Salto. Durante tres noches ha habido música en vivo o de ambiente para amenizar las veladas. La verbena estuvo también abierta al público el domingo a mediodía. Por la noche, se incorporó a su programa el concierto de la Banda Municipal, incluido en su ciclo estival.

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