Araceli Vinuesa Romero trabaja para dar a conocer la historia de su abuelo y tíos abuelos, que fueron fusilados

  • Los tres fueron víctimas de la persecución y la represión franquista en Rute, tras el golpe de Estado que precedió a la guerra civil española

Francisco Rafael Vinuesa es el abuelo de Araceli y fue fusilado en agosto del 36

Araceli Vinuesa Romero, sobre la represión franquista en Rute

Araceli Vinuesa Romero creció escuchando hablar de su abuelo Francisco Rafael Vinuesa. Éste fue fusilado el 17 de agosto de 1936, víctima de la represión franquista que se llevó a cabo en Rute, tras el golpe de Estado de 1936 que se produjo para acabar con el gobierno democrático de la II República y que terminó desencadenando la Guerra Civil española. También ha sabido siempre que sus tíos abuelos, Mariano y Luis Gutiérrez del Pino fueron apresados y asesinados. Éstos eran los hermanos de su abuela Araceli Gutiérrez. Ella fue la ruteña que enamoró a Francisco Rafael Vinuesa y que terminó casándose con él. Sin embargo, ha sido con el paso de los años y gracias a una información guardada con gran celo, por miedo a las represalias, cuando Araceli Vinuesa ha ido descubriendo más datos y detalles sobre su familia, en especial de su abuela.

  • La meta principal de Araceli es encontrar los restos de su abuelo Francisco Rafael Vinuesa y sus tíos abuelos Mariano y Luis Gutiérrez

Su abuelo Francisco Rafael Vinuesa, oriundo de Málaga, era abogado y periodista. Desarrolló su vida política entre Murcia y Rute. En Murcia fue delegado del Gobierno Civil durante la II República. En Rute fue un miembro socialista destacado del Frente Popular. Su nieta lo recuerda como “un hombre bueno, culto y formado”. Asegura que fue una persona comprometida con los obreros del campo y las clases trabajadoras. Francisco Rafael visitó Rute durante un verano y fue entonces cuando conoció y se enamoró de Araceli Gutiérrez del Pino. El noviazgo duró aproximadamente un año, y en enero de 1927 decidieron contraer matrimonio. Desde su unión con Araceli su destino estuvo vinculado a Rute.

Poco después del golpe de Estado del 36, fue apresado y tras permanecer veintidós días en la cárcel, fue fusilado el 17 de agosto de 1936, durante la conocida como “noche lorquiana”. Ese fue el día que fusilaron al poeta y escritor granadino. La misma noche en la que arrebataron la vida a Lorca en un barranco a las afueras de Granada, en Rute fueron asesinados varios concejales locales, como eran Juan José Rodríguez Rodríguez, Miguel Jurado Romero y el propio Francisco Rafael Vinuesa. Ese día fatídico día también perdió la vida su cuñado, Mariano Gutiérrez del Pino, quien formaba parte de la Corporación socialista del Ayuntamiento de Rute, y el joven juez Salvador Villanueva Porras. El otro hermano de su esposa, Luis Gutiérrez del Pino, pertenecía a Izquierda Republicana y fue fusilado con posteridad en la ciudad africana de Larache.

Con el paso de los años, Araceli Vinuesa Romero ha ido conociendo los detalles de esta historia. En cualquier caso, desde pequeñita, siempre supo que perdió a su abuelo y tíos abuelos por cuestiones políticas y por sus ideales. Para ella, el gran descubrimiento ha sido su abuela, Araceli Gutiérrez del Pino, la esposa de Francisco Rafael. Después de perder a su marido y hermanos, continuó con su activismo político. De hecho, en 1947 fue detenida, estuvo en la cárcel y le hicieron un consejo de guerra. Según los datos que obran en poder de su nieta, de las ciento cuarenta y dos personas que detuvieron en aquella ocasión, procedentes de toda la comarca, “ella fue la única mujer”. Afortunadamente, su causa fue sobreseída y logró salvar su vida.

Así, durante décadas, Araceli Gutiérrez guardó fotos, documentos, cartas o apuntes que evidenciaban el activismo político de sus hermanos y su marido. Entre las cartas que ha logrado conservar la familia, están unas que escribía su hermano Luis Gutiérrez a su madre Micaela cuando éste fue enviado a Larache. La última carta que se conserva fue enviada en 1937. En ella, Luis pregunta a su madre: “¿cómo está Mariano, que no me escribe?” Obviamente, no sabía que su hermano y cuñado habían sido fusilados. La familia le ocultó estos terribles hechos.

Todos esos documentos se guardaron celosamente por miedo a ser encontrados y sufrir las represalias. La familia regentaba una pastelería, en la calle Alfonso de Castro, y un hotel. De hecho, durante su corta estancia en Rute, Rafael Alberti menciona a Budía, que era maestro pastelero de la tienda de la familia Gutiérrez del Pino. Próximamente se va a presentar un nuevo libro del historiador Arcángel Bedmar sobre la persecución y represión sufrida en Rute por los vencedores de la Guerra Civil (1936-1950).

Bedmar cifra en 45 el número de habitantes de Rute fusilados por los sublevados. Cinco murieron en cárceles franquistas, mientras que otros cinco fallecieron tras salir de prisión. Incluso un vecino de Rute perdió la vida en el campo de concentración nazi de Mauthausen (Austria). En la actualidad, Araceli Vinuesa vive en Mairena del Alcor y es secretaria general de la Memoria Histórica de esta localidas sevillana. Asegura que su meta es que “encontrar los restos de su abuelo y sus tíos abuelos”, y que puedan ser “enterrados dignamente”. Por ahora, trabaja para dar a conocer la historia de su familia.

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