Uno de los burros que ha formado parte del proyecto de crioconservación
Desde hace un par de años un equipo de científicos de la Universidad de Córdoba, liderado por los profesores y doctores Jesús Manuel Dorado, Manuel Hidalgo y Mariano Herrera, colaboran estrechamente con la asociación de defensa del burro, Adebo. El proyecto en que trabajan lleva por nombre “Optimización de la crioconservación de espermatozoides del asno andaluz como estrategia de supervivencia de la razas asnales andaluzas”.
También participa un equipo de investigadores de la Unidad de Reproducción Asistida Equina del CENSYRA, de Badajoz (Extremadura. El proyecto se enmarca dentro del Plan Nacional de Investigación del Ministerio de Educación. Se busca la recuperación de razas en peligro de extinción, como es el caso de la raza asnal andaluza.
Comenzó a desarrollarse en el curso académico 2010-2011. Primero, con la realización de una serie de pruebas para comprobar la calidad del esperma y las características seminales propias. Posteriormente, durante el presente curso académico 2011-2012, se ha procedido a la creación del banco de Germoplasma y a desarrollar la metodología de la crioconservación del esperma. Para ello la Universidad ha contado con una asna y siete garañones de Adebo.
Según Jesús Manuel Dorado, en la actualidad los ejemplares que existen son pocos, viejos y están muy dispersos geográficamente. De ahí que valore muy positivamente la colaboración del presidente de Adebo, Pascual Rovira. Para Dorado, sus aportaciones han sido fundamentales para el desarrollo del proyecto. Según el profesor, este tipo de trabajos son claves para intentar conservar la raza y procurar obtener en el futuro camadas de buena calidad genética.
El proyecto no está concluido aún. Por tanto, no se han dado a conocer los resultados. No obstante, según Dorado, se ha podido comprobar que las características seminales de la raza asnal andaluza son ligeramente superiores a la raza zamorano-leonesa o la catalana, en cuanto a movimiento y volumen.
Además, ha estudiado la respuesta a la refrigeración. Esta metodología permite preservar el esperma durante un tiempo determinado. Se ha conseguido mantenerlo durante cuatro días con buena calidad espermática. Esto, según Dorado, permite transportar ese esperma a distintos puntos de España e incluso del resto de Europa.
Otro aspecto importante sobre el que se está trabajando es el relativo a la fertilidad post- descongelación. Hasta el momento, ése es el principal problema con el que se han encontrado.
El proyecto concluye en diciembre y será entonces cuando se publiquen los resultados finales. La Universidad prevé poder seguir contando con los burros de Pascual Rovira en futuras investigaciones. De hecho ya hay un proyecto presentado sobre la transferencia de embriones. Según el investigador, ésta es otra herramienta con la que cuenta para el mantenimiento de la especie.
