La delegación de la Mujer rinde homenaje a la mujer ruteña
Continuando con las actividades programadas por la delegación del Mujer del Ayuntamiento de Rute, este jueves, 19 de marzo, se llevó a cabo un programa especial de radio en el salón de actos del Edificio de Usos Múltiples. Un grupo numerosísimo de mujeres acudieron a la cita para participar de una experiencia radiofónica y poder hablar en público sobre cuestiones relacionadas con el ámbito femenino. Se contó con las intervenciones de la concejala de la Mujer, Inmaculada Piedra, la diputada provincial Eva María Fernández, la psicóloga Elisabet Torres, la directora del Centro de Educación Permanente Maestro Antonio Écija, Josefa Martínez, y la secretaria de la Asociación de Mujeres Horizonte de Rute, Abundi Alba.
Josefa Martínez asegura que las mujeres han cambiado, que, “afortunadamente”, en todas las épocas ha habido mujeres “que han luchado y se han revelado”. Así, en el ámbito laboral la mujer se ha incorporado a “un mundo pensado por y para los hombres”. Según Josefa, aún hay diferencia “entre lo que pensamos y lo que realmente hacemos”, dado que es “muy difícil deshacerse del manual sobre comportamiento con el que cada mujer nace”. Esto último afortunadamente también está cambiando.
Para Abundi Alba, las asociaciones de mujeres siguen siendo necesarias porque “una cosa es la igualdad teórica y otra la real”. Según ella, las asociaciones son “un lugar encuentro y para compartir lo que nos gusta”. La psicóloga Elisabet Torres se centró en “los muchos mitos y estereotipos existentes”, afirmando que no hay “nada que haga a las mujeres más sensibles”. Por el contrario, es la educación que recibimos la causa fundamental que determina el comportamiento de los hombres y de las mujeres. Por su parte, la concejala de la Mujer considera que hay que seguir trabajando para que las cargas familiares “sean compartidas por ambos cónyuges por igual”.
Durante las dos horas de duración del programa radiofónico se habló de la mujer trabajadora, de cómo ha evolucionado, sus principales logros, y de los tratos discriminatorios recibidos por el simple hecho de ser mujer. Se contó con las aportaciones de las alumnas del Centro de Educación Permanente, que con su testimonio rememoraron tiempos pasados. Muchas mujeres se sumaron a la tertulia contando sus propias experiencias laborales. Mujeres de Rute que han trabajado en el textil, en las fábricas de los mantecados, en la hostelería… Sus testimonios constituyen una buena muestra de cómo las cosas han cambiado. Nos recordaron épocas en la que las mujeres cobraban menos que los hombres.
También como mujeres trabajadoras expresaron su satisfacción por “ser capaces de ganar dinero” e incluso de sacar a adelante algún que otro proyecto empresarial. Fue el caso en Rute de la empresa de textil Confetrix. Sus fundadoras pidieron dinero “casa por casa” para poder comprar la maquinaria. De dicha iniciativa empresarial habló Consuelo Rodríguez, quien recuerda la experiencia como gratificante, pese a que otras circunstancias posteriores provocaron el cierre de la empresa.
La diputada provincial quiso aprovechar esta intervención para reconocer públicamente a estas mujeres “empresarias y emprendedoras”, destacando el mérito que suponen este tipo de iniciativas “que contribuyen con el desarrollo socioeconómico de los municipios”.
La parte final del programa fue la más emotiva. Se homenajeó a dos colectivos, el de alumnas del Centro de Educación Permanente y a la Asociación de Mujeres Horizonte de Rute. Ya a título individual se reconoció a Encarnación Siendones, directora del Centro de Salud de Rute, por su trayectoria profesional, y a María Victoria Trujillo, por ser capaz de asumir un cargo de representatividad como presidenta de un AMPA.
El alcalde Francisco Javier Altamirano fue el último en intervenir en el programa. Aprovechó para felicitar por la iniciativa al Centro de Educación Permanente, a las homenajeadas, a Radio Rute e incluso a la propia delegada provincial por acompañar en un día como éste. Altamirano hizo hincapié en la labor de educar “permanentemente en valores y justicia”, ya que una persona “puede ser buena o cruel, independientemente del sexo”.
