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La obra, con música del maestro José Serrano, se representó en el patio del colegio Ruperto Fernández Tenllado de manos del Teatro Lírico Andaluz
Por primera vez se ha representado en Rute por todo lo alto una obra completa de zarzuela. En otras ocasiones se había podido disfrutar del (mal) llamado “género chico” con interpretaciones puntuales de fragmentos. Había sido, por ejemplo, en conciertos ofrecidos por la Banda Municipal o la coral Bel Canto. Pero en este caso ha sido una puesta en escena en toda regla a cargo de la compañía de Teatro Lírico Andaluz. La iniciativa de la delegación de Cultura del Ayuntamiento de Rute se materializó en la calurosa noche del 14 de julio en el patio del colegio Ruperto Fernández Tenllado. Para ello se ha apostado por la obra “La canción del olvido”, que el año pasado cumplía el primer siglo desde su estreno.
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La obra, que consta de un único acto dividido en cuatro cuadros, fue compuesta por el maestro José Serrano. El libreto corresponde a Federico Romero Sarachaga y Guillermo Fernández-Shaw Iturralde, y refleja el gusto del público madrileño de principios del siglo pasado por la revista, la opereta y las variedades. El argumento cuenta una historia de amor “donjuanesco” ambientada en la localidad imaginaria de Sorrentinos, en Nápoles. En concreto, recrea las argucias de la princesa Rosina para conquistar al capitán Leonello. A partir de esa sencilla trama, se da pie a los números musicales de que consta la representación.
Argumento, música y puesta en escena, unidos por el prestigio del Teatro Lírico Andaluz, han suscitado el interés del público de Rute. Así, el patio del colegio se llenó para disfrutar de lo que la concejala del área, Ana Lazo, había marcado como una de las citas destacadas de la programación de los “Veranos Culturales de la Villa 2017”. En efecto, ha sido una oportunidad única para disfrutar de teatro de calidad, con artistas profesionales y de talla internacional. También los responsables de la compañía se marchan satisfechos, corroborando la satisfacción que, en palabras del propio director, Pablo Prados, suponía venir a Rute después de haber estado en algunos de los principales teatros de Andalucía y de fuera de nuestra comunidad autónoma.
