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El torero de origen ruteño José Garrido confirma su alternativa en la feria de San Isidro
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Con motivo de esta confirmación el músico Rafael Ramírez le compone un pasodoble
Rute ha tenido doble protagonismo en la corrida de la Feria de San Isidro del pasado 21 de mayo. Nuestro pueblo estuvo presente en el albero y en la grada. Por un lado, en el ruedo el cartel lo conformaban Julián López “El Juli”, Sebastián Castella y José Garrido, en lo que suponía la confirmación de su alternativa. Aunque este último es natural de Badajoz, las raíces del diestro están ligadas a nuestra localidad, ya que toda su familia es de Rute. Al mismo tiempo, desde hace cuatro años entre los componentes de la Banda de Música de la Plaza de Toros de Las Ventas está el músico ruteño Rafael Ramírez. Con motivo de la confirmación de Garrido como matador de toros, Ramírez le había compuesto un pasodoble que se estrenó esa misma tarde.
- Rafael Ramírez ha querido dedicar una pieza a un diestro con el que comparte raíces
- Pese a que la corrida estuvo deslucida por los astados, todos coinciden en que Garrido ofreció buenas maneras
Al músico le corresponde el honor de ser el primer ruteño que ha tocado en la que está considerada como la plaza de toros más importante del mundo. Según relata, pensó que podía estar bien componer una pieza para un diestro con el que comparte raíces. Nada más concebir la idea, confiesa que la inspiración estuvo de su lado. Recuerda que fue “un jueves”. Asegura que las musas lo visitaron de noche. El resultado fue que, literalmente, se tuvo que “levantar de la cama para coger lápiz y papel, y empezar a escribir el pasodoble que salió del tirón”.
Aunque el protagonismo debería haber estado en el ruedo, el estreno del pasodoble fue lo más aplaudido de la corrida. Ni José Garrido ni el resto de sus compañeros de terna pudieron hacer mucho con unos toros excesivamente mansos, que no dieron mucho de sí. Dentro de la decepción general que supusieron los seis astados, al menos a Garrido le queda el consuelo de haber escuchado la única ovación de toda la tarde. De hecho, todas las crónicas coinciden en señalar que su actuación fue de lo poco salvable. Se le notó la ilusión que suponía para él esta cita y puso voluntad y ganas, aunque sin encontrar respuesta en el ganado.
Garrido debutó con picadores cuando aún no había cumplido los 20 años, en marzo de 2003. Un año después hacía su presentación en Las Ventas, y en abril del año pasado tomaba la alternativa en Sevilla. En aquella ocasión le acompañaron Enrique Ponce y Sebastián Castella, con quien ha compartido cartel en su confirmación. Pese a que los toros no dieron apenas juego, pudo dejar entrever la calidad que atesora como diestro y el futuro que todos los entendidos le auguran.
