-
De nuevo este campeonato local se ha disputado en las instalaciones de Indusmetal Torres, del 22 al 24 de julio
-
La pareja formada por Jairo Reyes y Rubén Reina se adjudicó la final, donde no dieron opciones a Samuel González y Francisco Cruz
Del 22 al 24 de julio se ha celebrado el III Torneo de Pádel “Borriquita y Estrella”, organizado por la cofradía del mismo nombre. De nuevo se ha jugado en las instalaciones de Indusmetal Torres y ha contado con la presencia de 18 parejas. La alta participación confirma la pujanza de este deporte en Rute: 30 de los 36 jugadores eran locales. Otro aspecto que destacaba el presidente de la cofradía, José Manuel Molina, es el alto nivel de los jugadores. Se comprobó a lo largo del torneo, aunque curiosamente la final fue tal vez el partido menos disputado. Apenas llegó a la media hora. Ése fue el tiempo que necesitó la pareja formada por Jairo Reyes y Rubén Reina para “deshacerse” por un doble 6-2 de Samuel González y Francisco Cruz.
- La final no hizo justicia al resto del torneo, donde se han visto partidos muy igualados y con nivel
- Tanto la cofradía como el Ayuntamiento confían en contar para las próximas ediciones del torneo con pistas municipales
En contraste con esta rápida final, las semifinales tuvieron que decidirse en el tercer y definitivo set, al igual que otros partidos de rondas previas, que se prolongaron por encima de la hora y media. Ahí el balance fue más satisfactorio para el ruteño Samuel González y su compañero Francisco Cruz, natural de Palenciana y afincado en Lucena. Ahí se conocieron y González, que lleva tres años jugando al pádel, le animó a participar. Menos tiempo aún lleva uno de los ganadores, Rubén Reina, que empezó con este deporte hace apenas un año. Su compañero, Jairo Reyes, tras despuntar en fútbol y fútbol sala, había llegado al pádel tras su paso por el tenis.
A la hora de hacer las valoraciones, José Manuel Molina cree que la final no es reflejo del resto del torneo. De hecho, asegura que la pareja finalista es muy competente, “pero Jairo es hoy por hoy el mejor jugador de pádel de Rute”. Por lo demás, los horarios se habían ido cumpliendo dentro de lo previsto. El torneo se había estructurado en seis grupos de tres parejas cada uno. De esta forma, las parejas podían disputar un mínimo de dos partidos, siempre con algo en juego. De cada grupo se clasificaban los primeros, que junto a los dos mejores segundos entraban en las eliminatorias de octavos. Tras este éxito de convocatoria, el presidente confía en reeditar el torneo el año que viene. En principio, cuentan con la colaboración de Indusmetal Torres, pero espera que más pronto que tarde se pueda jugar en unas instalaciones municipales, puesto que la dotación de unas pistas “ya está en proyecto”.
Recogiendo el testigo, la concejala de Deportes, Mónica Caracuel, es consciente del auge de este deporte en Rute. Como recordó, ya que hay espacio de sobra en el antiguo Polideportivo Municipal, junto a la futura piscina, la idea es habilitar “lo antes posible” las pistas, habida cuenta de que no es un proyecto que requiera una inversión desorbitada. Por otra parte, la concejala destacó el apoyo de las instituciones al torneo, tanto el Ayuntamiento como la Diputación, que ha donado las camisetas y los trofeos. Por lo que respecta a la cofradía, Molina cree que, una vez puesto en marcha, el torneo no debe perderse. Además, insiste en la filosofía de que, en lugar de pedir a la gente, siempre es mejor ofrecer algo, en este caso la oportunidad de disfrutar de un deporte en alza.
Renovación en la cofradía
La tercera edición de este torneo ha llegado poco después de las elecciones a la junta de Gobierno de la cofradía, que se celebraban a primeros de mes. Tras dichas elecciones, José Manuel Molina ha renovado como presidente. Según ha informado, hay personas que se incorporan en esta nueva etapa, algunas procedentes del grupo joven. En otros casos, hay gente que se mantiene, aunque rotando en los cargos. Y hay quienes vuelven, como el anterior presidente, Miguel Ángel Borrego. Las nuevas incorporaciones servirán de transición, ya que, como fijan los estatutos de la cofradía, éste será el segundo y último mandato de Molina como presidente. Él mismo asegura que será bueno dejar paso y tomarse un descanso de las mayores responsabilidades. Eso sí, llegado el momento, estará disponible para lo que se le necesite.
