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Dentro de los actos del Día de la Mujer Rural, la Diputación ha promovido un taller de igualdad para jóvenes basado en el lenguaje verbal y gesticular del flamenco
Con el original nombre de “Ponte flamenca” se ha impartido en Rute un taller sobre igualdad de género dirigido a estudiantes del IES Nuevo Scala. Llegaba de manos de la Diputación de Córdoba, dentro de su programa “Tierra de mujeres”, y se enmarcaba en los actos del Día de la Mujer Rural, que se conmemoró el 15 de octubre. La concejala de Igualdad, Mónica Caracuel, destacó que el objetivo es visibilizar el papel de la mujer en entornos rurales como el de Rute. Ahí su papel “se ve mucho más desfavorecido”. Puesto que la desigualdad y los micromachismos también se detectan entre el público joven, se ha apostado por este taller para que se conciencien “de forma dinámica”.
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La monitora ha sido Araceli Caballero. El nombre de “Ponte flamenca” no es sólo un juego de palabras con este estilo sino con el hecho que las mujeres se pongan flamencas “como personas”. Para ello, se ha “traducido” el lenguaje del flamenco, el verbal y el no verbal. Incluso se han estudiado las letras del cante, que a veces “perpetúan o llevan a la normalidad muchos micromachismos”. Así, es más fácil que se identifiquen con estas situaciones. La idea de trabajar con adolescentes no sólo obedece a que representan el futuro. También en esas edades se detectan actitudes machistas.
Según la monitora, las chicas son más conscientes de esos comportamientos, al haber espacios de debate en las redes. Pero esos micromachismos “van cambiando y adaptándose a las nuevas tecnologías”. El ejemplo más claro es el control del móvil. Al mismo tiempo, las mujeres jóvenes acaban repitiendo los viejos roles y se crea “una relación de poder”. En el caso de ellos, cuesta más que se identifiquen con esa actitud de dominio “porque no se representan en esos patrones, aunque los tienen muy asumidos”.
