Muchas industrias han trabajado con las puertas cerradas o a medio subir
La octava huelga general de la democracia, la primera que sufre el Gobierno de Mariano Rajoy, ha tenido un seguimiento desigual según las distintas comunidades autónomas. La presencia de los piquetes informativos ha sido más notable en las capitales de provincia. Las cifras bailan entre el 85% de participación, que apuntan los sindicatos de UGT y CCOO, y las del Gobierno Central, que considera que el seguimiento ha sido claramente inferior al registrado en la anterior. Entonces se cifró en torno al 70%. A nivel general, los sectores que más han secundado esta huelga han sido los de la industria y el transporte, seguidos del comercio. En Rute la jornada se ha desarrollado prácticamente con normalidad en todos los sentidos, con escasa presencia de piquetes informativos. A primera hora de la mañana la industria parecía más paralizada. En concreto, la mayoría de las empresas del polígono de Las Salinas aparentemente estaban cerradas, algunas con las puertas a medio subir.
De hecho, se ha podido constatar que la actividad en el interior de estas empresas no se había paralizado. Algunas lo hacían de forma más visible. Así, en Cruzber, tan sólo ha ido a la huelga un trabajador de un total de 40. Una de las responsables, María del Carmen Cruz, afirma que muchos trabajadores “han decidido meter sus coches en el interior de las naves por temor a los piquetes”. No obstante, asegura que no ha habido presión de ningún tipo y que cada uno ha hecho lo que ha considerado más oportuno.
