El pantano está a punto de alcanzar el cien por cien de su capacidad, algo que no sucedía desde 1978

Se prevé que para los próximos días alcance su nivel mas  alto

Se prevé que para los próximos días alcance su nivel mas alto

El Pantano de Iznájar siendo tema de actualidad y despertando la curiosidad de los visitantes. El llamado “Lago de Andalucía”, con una capacidad de 981,1 hectómetros cúbicos, se encuentra a algo más del 98 por ciento. Se espera que se complete en los próximos días, un nivel que no se alcanzaba desde 1978. Ésta sería la segunda ocasión que el embalse, inaugurado el 6 de junio de 1969, alcanzase el cien por cien de su capacidad. La última vez que se dio una situación similar a la de ahora fue en 1997. Entonces se igualó ese 98 por ciento, aunque finalmente no llegó a completarse.

En estos momentos, sólo se está desembalsando el caudal ecológico, de dos metros cúbicos por segundo, mientras que la aportación está siendo de 45 metros cúbicos por segundo, fruto en buena medida del deshielo de Sierra Nevada. No obstante, la previsión es que en unas semanas comience a bajar debido al inicio de la campaña de riego.

Además de controlar el nivel del embalse, la consejería de Medioambiente ha comenzado obras de mejora en la presa por valor de más de cuatro millones de euros. Servirán para reforzar las galerías de drenaje del estribo izquierdo del pantano y para impermeabilizar las pilas del aliviadero. Así se podrá asegurar la operatividad de las compuertas. Ambas actuaciones forman parte del Plan de Mejora de Infraestructuras Hidráulicas que ejecuta la Agencia Andaluza del Agua. En la provincia de Córdoba este plan supone una inversión superior a los 39 millones de euros en casi treinta actuaciones.

La ladera sobre la que se apoya este estribo de la presa dispone de una amplia red de galerías repartidas en tres niveles. Su operatividad plena es imprescindible, sobre todo en el nivel más bajo. A lo largo de los años, el hormigón de revestimiento de las galerías se ha deteriorado por la agresividad del agua de filtración y la presencia de gas sulfhídrico. Esto ha provocado la aparición de fisuras y desprendimientos. Por ello, entre otras actuaciones, habrá una primera fase de demolición.

Posteriormente, se acometerá la reconstrucción de los hormigones deteriorados. También se afrontará el tratamiento superficial de protección de los nuevos anillos de hormigón, la reperforación de los drenes obstruidos y la limpieza de los existentes. Para ello se utilizarán cementos resistentes al ataque por sulfatos.

En cuanto a la impermeabilización de las pilas del aliviadero, las obras darán comienzo en las próximas semanas cuando baje el nivel del pantano. Esta actuación supone una inversión de 1.890.454 euros y también tiene un plazo de ejecución de catorce meses. Estas pilas presentan un deterioro superficial progresivo. El objetivo es proteger e impermeabilizar su estructura para detener su deterioro y restaurar las zonas dañadas.

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