Los profesores del instituto han portado una pancarta pidiendo en varios idiomas que vuelvan las niñas secuestras en Nigeria
El Instituto de Educación Secundaria “Nuevo Scala” de Rute ha llevado cabo un acto de apoyo a las chicas secuestradas en Nigeria hace unas semanas. A mediados de abril más de doscientas niñas fueron secuestradas durante un ataque a una escuela en el noreste de este país. Los asaltantes forman parte del grupo islamista radical Boko Haram. Llegaron de noche al colegio y obligaron a las niñas a subir a cuatro camiones. Desde entonces, se han producido multitudinarias manifestaciones de apoyo a estas chicas que aún hoy continúan en paradero desconocido. El respaldo internacional en la búsqueda de las niñas secuestradas no deja de crecer. Tras Estados Unidos y Reino Unido, Francia, China y Canadá ofrecieron ayuda. Al mismo tiempo, una campaña en Internet está recabando numerosos seguidores.
En el instituto ruteño un grupo de profesores ha optado por llevar a cabo actos simbólicos de apoyo a las chicas secuestradas. Todos los docentes se han manifestado en las puertas del centro portando una gran pancarta. En ella aparecen frases en distintos idiomas con las que se pide la liberación de las secuestradas. El profesor de Filosofía, Rafael Rodríguez, ha informado de que, previamente, en las aulas los docentes han hablado de este asunto con el alumnado. En clase se ha reflexionados sobre la situación que están padeciendo las niñas secuestradas en Nigeria y sobre los derechos y libertades que deben prevalecer, por encima del sexo, la raza o la región donde cada cual viva.
Según Rafael Rodríguez, el objetivo de este tipo de iniciativas es concienciar al alumnado de lo que está ocurriendo. De esta forma, se les hace partícipes de las campañas de presión hacia los gobiernos que se están llevando a cabo para que no se olviden de estas niñas. Al fin y al cabo, según subraya, los estudiantes de hoy serán los dirigentes y responsables de las tomas de decisión de mañana. En este sentido, Rafael Rodríguez considera que desde los centros educativos hay que contribuir a formar a los alumnos en valores y como personas. Como muestra, en el centro se ha aprovechado la oportunidad para dar a conocer la historia de Malala y su lucha por los derechos de la mujer.
