Los alumnos de sexto y “la Seño Lorena” pusieron el broche oro a la fiesta
Se acerca el final del año académico y con ello la llegada de las inminentes vacaciones de verano. De ahí que todos los centros de Educación Infantil y Primaria de Rute trabajen en su fiesta de fin de curso. Es el colofón a todo un año de trabajo. Los primeros en despedir el curso han sido los escolares de Fuente del Moral. Aún les queda, como al resto de alumnos, una semana de clase. Sin embargo, el pasado viernes 14 fue el día elegido para poner en escena las diferentes actuaciones que habían preparado. Como cada año, durante el último trimestre, siempre intenso, se combina la recta final de un curso académico, en el que hay que acabar de dar un temario, con los exámenes y la preparación de las actuaciones de fin de curso.
La fiesta se convirtió en un acto multitudinario, en el que estaban presentes los alumnos, sus maestros y toda su familia: padres, madres, tíos y abuelos. Todos se dieron cita para presenciar los bailes que el alumnado había ensayado durante meses. El escenario se situó en la pista polideportiva que hay justo al lado de las aulas de Infantil. Al fondo, se colocó una barra que estuvo gestionada por el Asociación de Padres y Madres. En total, hubo doce actuaciones. De conducir el acto y presentarlo se encargó uno de los maestros y también jefe de Estudios, José Antonio Tejero. Los más pequeños desfilaron con atuendos y música de “El Rey León”, “Blancanieves y los 7 enanitos”, “Mary Poppins” y “El libro de la selva”. Desde primero y hasta sexto curso de Primaria se fueron sucediendo escenografías de lo más variado, con destacada presencia de temas alusivos al mar, y con una actuación de “La Sirenita” y otra de “Piratas del Caribe”. El colofón llegó de manos de la “Seño Lorena”, que, junto con las voces de varios alumnos y alumnas, acompañó al piano durante la interpretación de “Colores en el viento”, de la película “Pocahontas”.
Durante la fiesta también se entregaron los premios a los tres primeros lectores y un regalo a los alumnos y alumnas de 6º curso. Fue un día divertido para los más pequeños, de nerviosismo para otros porque también supone superar el miedo escénico, emotivo y de despedida para los que dejan el centro. No faltaron lágrimas y la sensación de que una etapa se acaba. Llega el momento de despedirse del centro, de sus maestros de siempre y probablemente de algunos de sus compañeros. Para los de sexto, a partir de ahora se inicia otro ciclo formativo, con nuevos profesores, distinto centro y otros compañeros. Por eso, el director del colegio, José Luis Carpio, considera que este tipo de eventos son importantes y deben formar parte de trabajo pedagógico que realizan. Carpio aprovechó para resaltar el trabajo conjunto que realizan padres, maestros y alumnos para que este tipo de jornadas salgan adelante. A todos agradeció su implicación y participación; también al Ayuntamiento de Rute, por haberse prestado para el montaje del escenario y todo cuanto han necesitado.
