Cerca de cuarenta personas participan en la IV Quedada de Navidad del Club Atletismo Rute

  • Se trata de un evento abierto a quienes no sean socios del club, incluso aficionados de otros sitios

  • El club aprovechó el final la jornada para entregar los trofeos correspondientes al ranking local

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El grueso de los participantes en la quedada justo antes de partir del Paseo del Fresno

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Desde hace cuatro años, el Club Atletismo Rute predica con el ejemplo y empieza el año fomentando la práctica deportiva. Con esa finalidad nació la “Quedada de Navidad”, una actividad abierta a todo el mundo, sean o no socios. Consiste en juntarse quienes suelen salir a correr por separado, e ir agrupados en un recorrido no demasiado largo y a un ritmo asequible para todos los participantes. Como novedad principal, en esta ocasión se ha hecho por primera vez en sábado. Normalmente, se celebra el primer domingo del año, pero en este caso era justo el 1 de enero. Así que se llevó a cabo al sábado siguiente, el día 7. Otro cambio, más a nivel interno, es que la quedada puntuaba para el ranking local. Como recordaba Pedro Pérez, miembro del club y organizador de la jornada junto con Leonardo Piedra, en este ranking no se potencia la competitividad. Lo que prima es la participación en el mayor número posible de pruebas de fondo. Cada corredor suma puntos según los kilómetros de la carrera y el puesto que haya ocupado por delante de otros compañeros locales.

Para la quedada, se optó por establecer una puntuación idéntica, puesto que el objetivo era ir juntos. De hecho, en los nueve kilómetros del recorrido, desde el Paseo del Fresno hasta más allá del paraje de “La Teja”, con vuelta al mismo sitio, hubo varios reagrupamientos. No en vano, en este encuentro participaron algunos menores, familiares de los corredores del club. Todo ello propició que 37 corredores, entre los que había media docena de chicas, se sumaran a la quedada, pese presentarse una mañana, aunque soleada, bastante fría. Leonardo Piedra confirmaba que siempre se piensa en algo para que pueda ir todo el mundo, porque el objetivo es ir recuperándose de esos gramos de más que se acumulan con las comidas navideñas. Respecto al recorrido, muy similar al del año pasado, tenía ese punto “rompepiernas”, que es prácticamente inevitable en todo el término de Rute.

La jornada concluyó con un desayuno de convivencia y la entrega de los premios correspondientes al ranking local. Puesto que es algo simbólico y el año pasado no se hizo, recibieron sus trofeos los corredores más constantes de las dos últimas temporadas. Tras esta primera toma de contacto del año, el calendario se aprieta en las siguientes semanas. En realidad, matizaba Pedro Pérez, ni siquiera se ha parado en Navidad, pero se avecinan muchas pruebas con una nutrida presencia ruteña, como la inminente carrera de San Antón en Jaén o la media maratón de Puente Genil.

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