Los escolares de Rute radiografían la sociedad actual en sus redacciones para el día de la Constitución

  • Los representantes públicos reconocen la clarividencia de los menores para analizar la situación que vive el país

  • José Macías apeló en el discurso institucional a que los políticos de ahora tengan la altura de miras que hubo en el 78

Día de la Constitución
Los pequeños supieron llegar a los representantes políticos con su análisis de la España del siglo XXI

Galería    Audio

Día de la Constitución 02
Macías destacó cómo la unión y el consenso habían sido claves para elaborar un texto que ha permanecido vigente tantos años

Los escolares han cobrado aún más protagonismo en el aniversario de la Constitución española. Un año más, los actos en Rute giraron en torno al discurso institucional y las redacciones de los menores. De lo primero se ocupó el teniente de alcalde José Macías. El edil de IU centró su intervención en los derechos y deberes que marca el Título I nuestra Carta Magna, qué objetivos se trazaron en 1978 y en qué medida se cumplen en la España actual. Para trazar esos objetivos, Macías reconoció la “altura de miras” de los redactores del texto. Como apuntó, había que dar cabida “a todas las sensibilidades dentro de la unidad territorial del Estado”. Partiendo de esa premisa, la Constitución pone en valor “la solidaridad interterritorial”. Ese concepto resulta clave para la cohesión. Según dijo, no se trata de quitar a quien más produce para premiar al resto, sino de “redistribuir la riqueza con las regiones que mayor retraso han experimentado para hacer competitivas y productivas a todas por igual”.

  • Las redacciones reflejaron cuestiones latentes como la unidad de España, el paro, los desahucios o la violencia de género
  • Los políticos coinciden en que la Constitución ha de ser una ley viva, capaz de adaptarse desde el consenso a los tiempos actuales

Otro aspecto que reseñó es la abolición de la pena de muerte y el derecho a vivir sin miedo y a la libertad “en su más amplio sentido”. Tampoco pasó por alto otros derechos básicos como el de una educación obligatoria y gratuita, “que debería ser mucho más valorado”, o el de afiliarse y hacer huelga. Como recordó, la mayoría de las conquistas laborales actuales “se consiguieron con la lucha obrera”. En este sentido, mencionó que la unión de la clase trabajadora “sigue siendo ahora tan necesaria como antes”. Gracias a ella y a la altura de miras de aquellos políticos, la Constitución sigue vigente “aunque apenas tenga 169 artículos”. Cree que ello es posible porque su redacción “tuvo más horas de charlas con café y copa que de reuniones en despachos”. Aunque se tacha a esa generación de “vieja política”, está convencido de que dieron “una lección magistral sobre cómo hacer las cosas”. Ahora que se cuestiona su reforma, apela a esa misma altura de miras. Nuestra Carta Magna debe ser “una ley viva”, pero no se puede hacer “una reforma exprés”. Para ello, hacen falta “políticos que aúnen los valores del ayer y las fortalezas del mañana”. Mirándose en el espejo del 78, concluyó preguntándose en voz alta por qué no se va a poder hacer ahora lo que se pudo hacer entonces.

La segunda parte del acto del salón de plenos vino de manos de los escolares de Rute, con la lectura de las redacciones ganadoras entre los distintos centros de Educación Infantil y Primaria. Los niños y niñas que intervinieron fueron Hugo Macías Jiménez, de Fuente del Moral; Rocío Sánchez Pérez, de Los Pinos; Pablo Gámez Guerrero, de Ruperto Fernández Tenllado; y por parte del Colegio Público Rural Blas Infante, que agrupa a las aldeas de Rute, leyeron Alejandro Cabello Osuna, de Llanos de Don Juan, y Paula Granados Henares, de Zambra. Sin duda, lo más llamativo fue su capacidad para analizar y radiografiar la España del siglo XXI. Lejos de quedarse en la declaración de intenciones de la Carta Magna, sus redacciones reflejaron cuestiones latentes como la unidad de España, el paro, los desahucios, las personas de la tercera edad que han de mantener con sus pensiones al resto de la familia o la violencia de género.

Esa clarividencia no pasó inadvertida para los representantes políticos. Terminado el acto, ante las puertas del Ayuntamiento, con la interpretación de los himnos de Rute, Andalucía y España a cargo de la Banda Municipal, todos elogiaron los textos de los escolares. Para José Antonio Pino, del PP, habían resumido temas trascendentales que habrá que abordar con la Constitución en la mano. Cree que esa “transcripción” de nuestra realidad, contada por los pequeños, “es algo que llega”. Sin restarle méritos, no quiso olvidar el papel de la comunidad docente. Sus compañeros David Ruiz y Rafael García se sumaron a estas felicitaciones. Ruiz apeló además a la unión de todas las formaciones para solucionar esos problemas, mientras que García recomendó que se relea la Carta Magna, “porque nos garantiza la libertad y la igualdad ante la ley”.

Desde Izquierda Unida, el propio Macías subrayó que las redacciones han marcado  el sentir de muchos españoles que piensan que los derechos fundamentales “no se están salvaguardando”. Su compañera Ana Lazo remarcó “la sensibilidad” de los niños ante la España actual. Cree que su mensaje ha de ser “un toque de atención” a los políticos para ver qué vacíos hay que cubrir. Además, considera muy positivo que estén al día de estos asuntos y ve importantísimo que en cuestiones como la violencia de género exista “esta semilla desde abajo” para acabar con esa lacra social. Respecto a lo que queda del espíritu del 78, Macías insistió en que “siempre hay nexos”. Lo importante es que la Constitución no sea rígida “y se adapte a los tiempos”.

En la misma línea, el alcalde Antonio Ruiz entiende que tiene aún más sentido celebrar este día por esa necesidad de que el texto se adapte a la realidad actual. Debe volver a ser “el referente” para garantizar esos derechos “que tanto costó conquistar y que están más en cuestión que nunca”. Al mismo tiempo, no cabe el inmovilismo de coger la Constitución “como una bandera obsoleta sino como bandera de progreso”. Asegura que hace falta “un pacto de Estado” y la mencionada amplitud de miras de hace 37 años. Retomando la lucidez de los escolares, su compañera del PSOE, María Dolores Peláez, reivindicó el papel de la educación pública y señaló que los pequeños habían trazado las líneas hacia dónde debe encaminarse la reforma de la Carta Magna. Para ello, cree que debe volver a respirarse “el aire de respeto y consenso de la Transición”.

Deja un comentario